miércoles, 27 de octubre de 2010

Con salarios de hambre es imposible que haya salud mental, menos que avancemos al primer mundo

El gobierno actual no protege la salud mental de la población y por el contrario la daña con sueldos de hambre. Este tema se ve muy objetivamente en los trabajadores del campo , una actividad ligada a la agroexportación que está haciendo ricos a unos pocos y cada vez más pobres a la mayoría.
No solo sufren peste bubónica, los campesinos, por dormir en el suelo , conviviendo con los roedores de las grandes plantaciones de caña de azúcar en el norte, también se hace imposible que logren alcanzar niveles adecuados de salud mental por los salarios que se les paga que no solo no les permite recuperar la fuerza de trabajo que venden , y con la que crean la riqueza que va al bolsillo de unos pocos, si no que tampoco pueden pagar estudio de sus hijos, menos actividades de higiene mental tan importantes como recreación, cultural esparcimiento, relaciones sociales, diversión , deportes, o una vida familiar dinámica. Así la calidad de vida de ellos se va deteriorando y algunos buscan en el alcoholo un paliativo a sus grandes carencias , frustraciones y abandono social al que los someten.
Este tema, según  estudios de investigadores sociales como Mujica y el Ingeniero Julio Gamero de la UNI, vienen desde los años de la mafia fujimontesinista que implementaron la famosa ley 273060. Esta ley, establece un régimen altamente discriminatorio para los campesinos, con lo que se da una sobreexplotación totalmente inhumana
Según este Ingeniero , un campesino apenas gana 766 nuevos soles al mes, que incluye las gratificaciones y las CTS. Ello implica unos 9mil 200 al año, mientras un miembro del directorio gana unos 25 mil soles al mes , que equivale a unos 311 mil al año. Es una diferencia abismal, que establece un régimen de desigualdad social lamentable generadora de malestar.
El régimen fujimontesista estableció que un campesino gane solo 19.51 soles de salario diario , incluido los jornales de más de 8 horas diarias.
 Ello lleva a que los campesinos vivan en condiciones pauperrimas, lo que se ha de ir agravando con la aplicación de los variados TLC, que ha implementado el régimen actual , con lo cual pretenden sostener que vamos a llegar al primer mundo.
Tales ingresos va a llevar a una mayor desnutrición, y graves daños en la salud mental de la población rural que no es protegida por una legislación justa y equitativa que resguarde el adecuado reparto de la riqueza que  se produce en el campo.
No solo se sobreexplota el campo, consumiéndose el recurso hídrico que ya es de por si escaso , si no que se lleva al campesino a condiciones infrahumanas de vida, sin importarles los daños que todo ello ocasiona en el desarrollo humano y de la persona.
La FAO ha señalado que el hambre en el mundo se ha incrementado y recomienda que se desarrollen los huertos familiares, y los cultivos para el consumo interno, lo cual no es aceptado por los gobiernos que se manejan con una política de tipo neoliberal a los cuales solo les interesa la ganancia de unos pocos.
Tenemos que ser objetivos, la salud mental tiene una base económica , la cual afecta seriamente al ser humano, por la discriminación laboral que predomina en la actualidad.

No hay comentarios: